Saw 2 (2005)

Aunque James Wan abandona el proyecto, su sucesor Darren Lynn Bousman, no hace a la historia decaer, sino que mantiene el enfermizo feel de la primera cinta; y nos da una secuela de lujo que aterraría y entretendría a los más rudos fans del gore y el terror.
Tal como las reglas del terror son puestas en Scream por Randy Meeks, en una secuela todo debe de duplicarse, el peligro se duplica o más, todo es más intenso, se revelan cosas sobre la trama principal, se revelan villanos, todos estpan en tu contra... Eso es Saw 2.
Un puente para lo que parecía se volvería una trilogía, pero solo ayuda a que se desarrollen más y más subtramas para las siguientes películas.
Que si es mejor o peor que la primera, es una continuación dignifica la primera, pero no se desvaloriza por esto; cada una de estas películas es única y no es comparable la una con la otra.